Una mujer vió como dos jóvenes lanzaron a MATOJO desde un coche. El pobrecito debido al susto, empezó a correr sin rumbo fijo hasta esconderse bajo un matorral, totalmente aterrado y bloqueado.
Sacarle de ahí no resulto fácil ya que podiamos arañar al pequeño. Al cogerle comenzó a chillar presa del pánico. Al chillar nuestro pequeño MATOJO, oímos llantos como a unos 20 metros, seguimos ese rastro hasta que encontramos a MATORRAL Y ZARZA. Alguno de ellos incluso nos mordió por estar totalmente aterrorizados. Sus corazones iban a mil por hora.
Una mujer vió como dos jóvenes lanzaron a MATOJO desde un coche. El pobrecito debido al susto, empezó a correr sin rumbo fijo hasta esconderse bajo un matorral, totalmente aterrado y bloqueado.
Sacarle de ahí no resulto fácil ya que podiamos arañar al pequeño. Al cogerle comenzó a chillar presa del pánico. Al chillar nuestro pequeño MATOJO, oímos llantos como a unos 20 metros, seguimos ese rastro hasta que encontramos a MATORRAL Y ZARZA. Alguno de ellos incluso nos mordió por estar totalmente aterrorizados. Sus corazones iban a mil por hora.
Este precioso perro iba caminando por la orilla de la carretera totalmente desubicado. Cruzando la carretera de un lado a otro. La chica que lo recogió tuvo que frenar porque casi le atropella.
No dudo en bajarse del coche y subirle al mismo. Es un perro que se comporta genial en casa y que super adora su pelota de Bob Esponja, de ahí su nombre.
Está preciosa camada ha sido abandonada junto a un contenedor entre invernaderos. Hay que ser mala persona para dejarlos ahí sabiendo que es una zona poco transitada. ¿Cuál era tu idea, qué murieran??. Mala persona por no decirte cosas peores. Pues te ha salido mal el plan, ahora están a salvo y les buscaremos unas familias que los llenen de amor y felicidad para siempre.
Mika y Rafaelo: estas dos preciosidades fueron encontradas por un chico en la orilla de la carretera. Ella creemos que la mamá, buscaba ayuda desesperada para el que creemos su hijo.
El pobre ya se había rendido por una herida feísima en su cola, muy infectada lo cual le ocasionaba unas fiebres altas que lo tenían sin fuerzas. Este chico los atendió, los llevo al veterinario para sus primeros cuidados de esas heridas y los llevo a lapeluquería donde los dejaron así de preciosos.
