Pili y Mili: Alguien avisó de estas dos princesas en la orilla de la carretera por días. Por suerte, esta información llegó a una maravillosa mujer que no dudó en echarse a la calle en busca de estas pequeñas ya que es una carretera muy transitada y sobretodo por camiones. De dejarlas allí, no tardarían en morir atropelladas.

Por suerte pudieron rescatarlas y las metieron en un lugar que le dejaron para mantenerlas a salvo. Posteriormente nos escribían de manera desesperada y gracias a que han colaborado con algunos de sus gastos, hemos podido darles entrada, así que ahora Pili y Mili, se encuentran con nosotras, olvidando todo el trauma vivido.

¡¡ Bienvenidas pequeñas !!.

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