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Twingo y su hermanito Casio nacieron en un invernadero. Nunca les ha faltado comida pero nunca han tenido cariño.

Por desgracia para ellos, la gente que siempre se ha encargado de alimentarlos se han ido y han vendido el invernadero. Ahora son un estorbo, así que han sido rescatados gracias a Rosa que ha colaborado también con parte de sus gastos. Estos dos hermanitos preciosos son algo tímidos pero muy buenos.

25 Octubre de 2023: Mirar que guapo esta Twingo...

Casio y su hermano Twingo nacieron en un invernadero. Nunca les ha faltado comida pero nunca han tenido cariño.

Por desgracia para ellos, la gente que siempre se ha encargado de alimentarlos se han ido y han vendido el invernadero. Ahora son un estorbo, así que han sido rescatados gracias a Rosa que ha colaborado también con parte de sus gastos. Estos dos hermanitos preciosos son algo tímidos pero muy buenos.

24 Mayo de 2023: Mirar que guapo esta Casio...

De la historia de esta preciosidad no sabemos apenas nada. Por lo que nos dicen, apareció hace como 6 meses deambulando por un pueblo. Pronto se hizo la amiga inseparable de Dolce.

Es una perrita muy cariñosa y sociable con todos, le encanta correr y jugar.

09 Marzo de 2023: Mirar que guapa esta Gabanna...

Siempre se necesitan madrinas o padrinos para ayudarnos con sus gastos, si estas interesado en adoptar, amadrinar, o cualquier duda escribe a lahuellaroja.almeria@gmail.com

Este maravilloso podenquito no ha tenido una vida fácil, su dueño no lo trataba demasiado bien.

Gracias a una persona que se decidió a denunciar, esta preciosidad fue retirado y dejado en el centro zoosanitario. Ahora gracias al mismo ángel que ya le ayudó a salir del infierno, le ha ayudado a salir de perrera, pagando su salida.

Así que esté Podenquito súper mega alegre busca una familia que le quiera para toda su vida.

24 Mayo de 2023: Mirar que guapo esta Victorio...

Recibíamos una llamada de los vecinos de al lado del refugio diciendo que llevaba toda la mañana un perro grande allí, que entró al abrir a las 8, y que por más que intentaban echarlo, se daba la vuelta y volvía a meterse en las instalaciones. Imaginamos que como le habían estado ofreciendo comida, no quería volver a pasar penurias.

La compañera se acercó y allí estaba Águeda, sentadita en un rincón viendo pasar a los trabajadores, moviendo su colita.

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